Juventud reclama un cambio, publicada 06/08/2015–Reproducción
Juventud reclama un cambio lunes 8 de junio, 2015
Hernan Padilla
El estancamiento económico que experimentamos limita las oportunidades de empleo personal y de creación de empleos a jóvenes empresarios. Han causado que miles de jóvenes abandonen la isla buscando nuevas y mejores oportunidades de educación, progreso y mejor calidad de vida.
La crisis económica, política y social que vivimos bajo el ELA-colonial ha provocado el éxodo poblacional que a su vez debilita la cohesión familiar, afectando esa institución como figura central de nuestra sociedad y la base de nuestra cultura.
Las estadísticas de la página web del “Instituto del Desarrollo de la Juventud”, sirven para entender la preocupación de los jóvenes que no disfrutan de las mismas oportunidades y progreso. El 41% de los hogares con niños y jóvenes necesitan ayuda del Programa de Asistencia Nutricional; 44% de niños entre 3 y 4 años no están matriculados en pre-kinder; el 57% de la población menor de 18 años vive bajo el nivel federal de pobreza; y el promedio intermedio de ingresos de familias con menores de 18 años es solo $20,459 (muy por debajo del Estado con menor ingreso y del ingreso nacional promedio).
Ante la crisis crónica que afecta a la juventud puertorriqueña, Anthony Carrillo, VP Caucus Hispano de Juventud Demócrata, insiste en que “la falta de oportunidades en la isla no puede estar desligada de nuestra relación política territorial actual”. Carrillo enfatiza que “el argumento del PPD de que el estatus no está en issue” pierde validez cuando observamos los datos y la evidencia sobre la fuga de talento joven en nuestra isla”.
Además, sostiene que el gobierno actual ha olvidado el llamado de miles de jóvenes que rechazaron el status actual y votaron a favor de la estadidad en el 2012. Carrillo está convencido de que la Estadidad representa mayores y mejores oportunidades; garantiza igualdad política e inspira esperanza a nuestra juventud que demanda un cambio a nuestro fallido sistema sociopolítico; y promoverá mayor actividad económica, creación de riqueza y oportunidades de empleo para las nuevas generaciones.
Kevin McClintock, quien estudia Ciencias Políticas y Gobierno en la Universidad de Georgetown, resumió que aunque los puertorriqueños son ciudadanos americanos, la vida de un niño puertorriqueño es muy diferente a la de sus hermanos residentes en los estados.
Se refería a las desventajas del estatus colonial que afectan la vida de un puertorriqueño desde que nace porque se siente la desigualdad tanto para el individuo como para su familia.
Otra faceta de la desigualdad la experimentamos mientras vamos creciendo. En Puerto Rico, no tenemos el derecho de votar por el Presidente de los Estados Unidos, ni por oficiales electos que nos representen con su voto en el Congreso. McClintock exclamó “Me siento desigual a mis compañeros de clase, porque ellos sí tienen el derecho de salir a votar cada dos años”.
No cabe duda que aunque Puerto Rico parece un estado por la manera que vivimos, el sistema de gobierno, y el hecho de que somos ciudadanos Americanos, nuestro status colonial nos niega la igualdad de derechos que se disfrutan en los 50 Estados.
Zulma Rovira, JD, Presidenta de la Juventud de Igualdad Futuro Seguro, sostiene que la estadidad es la mejor herramienta para lograr la igualdad a la que aspira la juventud para todos los ciudadanos de EEUU que residen en PR. “La igualdad como ciudadanos americanos brinda esperanza a la juventud y a los jóvenes profesionales”.
Dentro de la estadidad disfrutamos de todos los derechos de la Constitución de los Estados Unidos, se logra la aplicación uniforme de todas las leyes aprobadas por el Congreso, se elimina la desigualdad política y constitucional entre los ciudadanos de los otros 50 estados y los ciudadanos residentes de Puerto Rico y se garantizan los mismas condiciones, derechos y oportunidades para lograr un mejor futuro.