Iniciativa de la Juventud de Igualdad: Carta/Testimonio 10/08/14
Hola todos:
Durante el mes de octubre los Jóvenes de Igualdad estarán compartiendo testimoniales de personas que se han convencido que la estadidad es la única opción y desean que otros los sigan.
Ellos han desarrollado una iniciativa llamada “Querida Igualdad”. Mediante la misma desean llegar a las miles de personas que al igual que Roberta, en la carta de hoy, se han convencido que Puerto Rico necesita resolver el problema del status a través de la estadidad. Estas personas no son penepés y ya tampoco son populares por lo que se encuentran desprovistos de un lugar donde se sientan cómodos y desde donde puedas aportar.
Roberta encontró su casa en Igualdad. Eso nos alegra y es nuestro objetivo que, esos miles de estadistas por convencimiento que están allá afuera, también nos conozcan y se sienta parte de esta fuerza grande de un pueblo que ya escogió su destino, ahora nos toca caminar juntos hacia él haciendo el trabajo que nos corresponde.
¡Esperamos la disfruten!
Los invitamos a leerla y compartirla. Nos gustaría saber su opinión.
Querida Igualdad:
Antes de comenzar, quiero darte un poco de trasfondo sobre quien soy. Ya que como dijo Benjamín Franklin a la gente usualmente le gusta saber quien escribe para saber si le va a gustar o no, lo que está a punto de leer.
Soy una mujer joven profesional de veintisiete años, que entre una cosa y otra lleva los pasados 10 años entre estudios y trabajos viviendo tiempos en la isla y el “mainland”. Vengo de una familia donde el partido popular es una religión, la política es nuestro deporte favorito y la gordura es una plaga horrorosa (pero uno no hace nada más que llegar a casa de la abuela, hay comida para un ejército y sólo somos 4).
Como podrás entender, salir del closet como estadista en mi núcleo familiar no fue una tarea muy fácil. Mi mamá todavía me mira mal cuando le digo que voy a eventos estadistas, mi abuela casi llora cuando le dije que creía en la estadidad y las dos piensan que esto es una cosa de “llevar la contraria”. Total, si hubiese sido por rebeldía me hubiese hecho una pantalla en la lengua y un tatuaje en el brazo. Habiendo compartido esto, quiero que entiendas por qué todavía te escribo desde el anonimato. Quizás algún día a través de estas cartas te revele mi verdadera identidad, pero por ahora no me interesa pasar por un trámite de desheredación.
Vamos a hablar claro, la mayoría de boricuas aficionados del deporte practican la política como sólo nosotros sabemos hacer las cosas: como tremendos fanáticos. El problema con esto es que vivimos en una cultura donde se nos hace difícil pensar fuera de las líneas partidistas, que quede claro el hecho de que ya no me identifico con el partido popular automáticamente no me hace penepé. Mucha gente no entiende esto, pero hay que empezar a derrumbar esas barreras impuestas por nosotros mismo, si deseamos conseguir lo mejor para nuestra isla.
Mi transición para salir de las sombras del ideal colonialista ha sido una paulatina pero constante, desde el plebiscito pasado comencé a adentrarme en los planteamientos presentados en cuanto al estatus por las diferentes colectividades partidistas y cívicas. Es así como llegue a Igualdad, Futuro Seguro. Desde el principio la organización me llamó la atención, primero porque es una no partidista, segundo porque seamos honestos, quién puede decirle que no a un ideal tan sólido como la -Igualdad.
Es triste sentir que puedo ser perseguida por mi ideal, un ideal al cual llegue por convicción propia. Es triste que no puedo abiertamente decir que soy parte de la mayoría de puertorriqueños, que ya no aguantan más este sistema insostenible que es el ELA.
Así que quiero agradecerte Igualdad, por diseñar a través de este proyecto un espacio donde estadistas fuera de líneas partidistas se sientan seguros de emitir su opinión y relatar sus historias. Sé que esta es la primera de muchas cartas que estaremos intercambiando.
Con mucho amor y esperanzas,
Roberta